VIDEO ARTE

Para halar del Video Arte que es imagen en movimiento y sonido, y también arte y medios de comunicación, por lo cual hablamos de la producción artística en el campo de intersección entre arte, ciencia y tecnología, como manifestación de la cultura contemporánea y específicamente del arte contemporáneo, inevitablemente tenemos de hablar también de la experimentación del sonido y de la imagen en las narrativas contemporáneas

Es importante tener siempre presente que el arte contemporáneo, es realizado con los medios de su tiempo, de allí surge el vídeo arte como medio de expresión artística.

Desde sus primeras experiencias, el video arte siempre estuvo marcado por figuras contrarias a la comunicación habitual de los medios, como el ruido, la distorsión, la metamorfosis o transformación de la imagen, creándose la apropiación técnica y al mismo tiempo la subversión /rebelión, insubordinación y desestabilización del medio visual.

Al hablar de vídeo arte hablamos de experimentación, pues es una de las premisas que se ha dado desde su inicio con los primeros artistas del video arte que fueron el alemán Wolf Vostell y la televisión de collage y el coreano Nam June Paik, del experimentalismo (el cual realiza distorsiones del flujo televisivo, fue el primer artista en ver en el video un medio maleable, fluido, una forma capaz de abandonar las estructuras discursivas formales y de operar a un nivel mas transcendente. Ambos artistas integrantes del Grupo Fluxus, del final de la década de 1960. 

Hasta entonces, el video era utilizado apenas para fines comerciales, como entrenamiento en empresas o para televisión. Surge como medio artístico en un contexto en el cual los artistas buscaban un arte contraria a la comercial, entre sus principios está la crítica a la televisión, una especie de contra-televisión o subversión del medio.

Los artistas del movimiento "Fluxus" buscaban utilizar nuevos soportes y de esa manera, vieron la posibilidad de recurrir al audiovisual electrónico para crear una "contra-televisión", asimilando el medio y subvirtiendo su uso más frecuente. En ese inicio del vídeo arte, el alto precio de los equipos limitó ese lenguaje a artistas de países desarrollados, donde el acceso a la tecnología era menos costoso.

Con todo, el video enfrentó dificultades para ser incorporado a las artes, lo que ocurrió poco a poco a lo largo de la década de 1970. La presencia del audiovisual en las artes plásticas en el mundo, ocurría desde el final de la década anterior, impulsada por el experimentalismo presente en el cine de la época, especialmente en el Cine Nuevo. Sin embargo, las producciones utilizaban super-8 o película cinematográfica, y no soportes electrónicos.

A principios de los años 70, algunas iniciativas aisladas con ese apoyo se registraron en algunas partes del mundo, pero también existieron instituciones que apoyaron el video arte como fue el Instituto de Arte Contemporáneo de la Universidad de Pensilvania, que coordinó varias representaciones y exhibiciones de vídeo Art.

Con el tiempo el vídeo arte (arte y medios de comunicación), se fue mezclando con la instalación creando la video-instalación, pues el vídeo arte se transforma en video instalación: arte multimedia, múltiple, asumiendo la complejidad del espacio, utilizando los factores externos de la luz, de las formas (materiales), del sonido del movimiento, del hombre y de las múltiples posibilidades de combinar todos estos elementos, con el objetivo de expandir el horizonte visual e intensificar la experiencia sensorial.

Video Instalación "olhAR-TE-III-com_duçora" presentada en la Exposición "ALGO DOCE" , en la Conmemoración del día de la ciudad de Funchal, en el Museo "A Cidade do Açúcar", en el 2015, en Funchal, Portugal

El video arte se nutre actualmente también del arte digital, pues su fuerte cariz experimental permite alcanzar y recrear los conceptos al video artista.

Es importante tener siempre presente que el video arte aunque se nutre del cine de culto, y ciertamente del lenguaje cinematográfico. Al contrario del cine el Video Arte no está interesado en escenificar una historia, en presentar una narrativa completa, sea lineal, fragmentada o laberíntica, el video arte crea su propia narrativa experimental, que puede ser inacabada, discontinua, fragmentada o dispersada.

Personalmente creo que por medio del lenguaje del vídeo arte, que propone a veces la imagen distorsionada, descompuesta, sucia, superpuesta y desintegrada, se crea un renacer de la imagen, una nueva imagen de creación conceptual, que es uno de mis grandes intereses a nivel estético.

El video arte permite la posibilidad de crear grandes cantidades de imágenes y fundirlas con el sonido, de tener la oportunidad que desde otro lenguaje como es la creación sonora, donde ésta a su vez pueda ser mezclada con la imagen para crear un mayor énfasis en la expresión artística y así un mayor énfasis en las composiciones y el concepto del artista, en el intento de crear un diálogo con lo cotidiano en sus obras.

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